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Vecinos de Piélagos cambian la esterilla por la silla para practicar yoga en un nuevo taller de UNATE

Hasta el próximo mes de julio, de la mano de Encina Martínez realizarán ejercicios respiratorios, de corrección postural, al tiempo que activan sus órganos internos y desarrollan su capacidad de concentración

Un grupo de vecinos de Piélagos, mayores todos ellos de 50 años, han cambiado desde este mes de mayo la esterilla por la silla para practicar yoga en un nuevo taller impartido por UNATE -La Universidad Permanente- en Renedo.

Se trata de una de las actividades desarrolladas durante el curso 2021-2022 por UNATE en el municipio, a través del convenio de colaboración suscrito con el Ayuntamiento de Piélagos.

Encina Martínez, facilitadora de la actividad, explica que lo bonito de esta disciplina tradicional originada en la India es que no tienen condición física,  edad, sexo, religión o clase social.

De hecho, se muestra convencida de que el yoga “lo puede hacer cualquier persona y se puede adaptar a las necesidades de cada uno”.

Como ejemplo, cita el Taller de Yoga en silla, un objeto que, matiza, está ahí para ayudar como soporte. “Nosotros usamos la silla, al igual que el que hace yoga en la esterilla utiliza un cinturón o un taco”, aclara.

Encima Martínez recalca que sus alumnos hacen lo mismo que en cualquier otra clase de yoga: pranayamas, asanas, relajación y meditación, además de una pequeña parte de filosofía del Yoga.

Así, destaca los ejercicios respiratorios que sirven para aprender la “relación estrecha” que hay entre la respiración y la emoción.

En este sentido, señala que lo que se busca es que los participantes aprendan a controlar la respiración para que no se alteren o pueden controlar un momento de ansiedad antes de que llegue a desatarse.

La facilitadora del Taller de Yoga en silla de UNATE también destaca los ejercicios de corrección postural con lo que se van trabajando todas las partes cuerpo. “Movilizamos las que no se suelen mover; fortalecemos las que se van quedando débiles con la edad y corregimos esas malas posturas que hacen que otras partes del cuerpo se resientan”, relata  Encima Martínez, quien afirma que, al final, “el cuerpo está mejor y más equilibrado”.

Asimismo, hace hincapié en que, con la práctica del yoga, no  sólo  se trabaja la parte exterior del cuerpo sino que también se activan los órganos internos.

De hecho, asegura que mediante los masajes en las torsiones e inclinaciones, se consigue que los sistemas circulatorio, digestivo, excretor y nervioso “funcionen mejor”.

Por último, recuerda que practicar yoga no sólo es mover el cuerpo sino también lograr una alta concentración y es que, en su opinión, el trabajo mental tiene que estar ahí porque es así cuando la mente se cama.