Cultura

Marcos Díez explica el origen de su obra en el Centro Cultural Quijano

El poeta santanderino ha protagonizado una de las actividades organizadas por la Concejalía de Cultura con motivo de la I edición del ‘Otoño cultural’ del municipio

El poeta Marcos Díez (Santander 1976) ha explicado el origen de su obra, fundamentalmente de su creación poética, pero también de sus incursiones en la prosa: en los relatos, en los cuentos y en esa primera novela, en la que ya está trabajando.

“Escritor tardío”, tal y como el mismo ha confesado durante el recital poético que ha protagonizado en el Centro Cultural Quijano, dentro de las actividades organizadas por la Concejalía de Cultura con motivo de la I edición del ‘Otoño cultural’ del municipio, ha asegurado que sus poemas “parten de una mirada de lo cotidiano”.

En este sentido, ha reconocido que, al igual que los niños se asombran cuando ven algo como el vuelo de un pájaro por primera vez, “todo lo que veo es un festín para mí”.

Marcos Díez ha hecho hincapié en que “la belleza está en los ojos del que mira” y ha puesto como ejemplo el muro existente en la localidad de Quijano, que inspiró el poema del mismo nombre, incluido dentro de su poemario ‘Combustión’, en alusión a la actividad del taller donde pasó parte de su infancia.

El poeta se ha definido como “un pesimista vitalista” y es que, tal y como ha contado, ese pesimismo no le lleva a la tristeza sino a engancharse con la vida: con esa quedada con sus viejos compañeros de la televisión donde trabajo, que inspiró ‘El encuentro’ o el funeral de su tío, en el que se basó para componer ‘Michelin, S.A’.

Hace falta contención

Preguntado por el público acerca de su inspiración, Marcos Díez ha aseverado que para que el poema surja “hace falta contención”.

“Desde que miras hasta que escribes el poema no es un proceso automático”, ha recalcado Marcos Díez, quien ha matizado que “la poesía se escribe despacito”.

El poeta santanderino, quien ha afirmado que tiene la necesidad de ponerse a escribir, ha puntualizado que, en su caso, “necesito sentir extrañeza para escribir un poema