Cultura

Antonino Herrera, fundador del Coro Ronda Besaya, distinguido a título póstumo como Marcero Mayor 2022 de Piélagos

Su viuda, María Jesús, ha recibido este domingo, de manos de la alcaldesa, Verónica Samperio, y del concejal de Cultura, Roberto Ruiz Argumosa, la placa y la banda con la que el municipio ha querido agradecerle su contribución fundamental para mantener viva una de las más antiguas tradiciones de Cantabria

Antonino Herrera, fundador y director honorario del Coro Ronda Besaya, ha sido distinguido a título póstumo como Marcero Mayor 2022 de Piélagos.

Su viuda, María Jesús, ha recibido este domingo, en el Centro Cultural Quijano, de manos de la alcaldesa, Verónica Samperio, y del concejal de Cultura, Roberto Ruiz Argumosa, la placa y la banda con la que el municipio ha querido agradecerle su contribución fundamental para mantener viva una de las más antiguas tradiciones de Cantabria.

La directora del Coro Columba Quijano, María Jesús Sánchez Barcenilla ‘Koki” ha recordado que Antonino Herrera no sólo cantó sino que enseñó durante años las marzas.

“Con su voz y su batuta dirigió al Coro Ronda Besaya y tuvo la gentileza de dejarme aprender estas canciones ancestrales, algo que no estaba bien visto pues las mujeres no cantaban las marzas, ya que era cosa de hombres”, ha rememorado María Jesús Sánchez Barcenilla.

En este sentido, ha contado que hace treinta y tantos años ella había empezado a cantar las marzas con su padre, que se las había enseñado, pero quería aprender más. Por eso, le recomendaron que hablara con Antonino que las cantaba con el Coro Ronda Besaya.

“Siéntate en un rincón para que no me digan nada los otros hombres me dijo y allí estuve y me las enseñó con todo el cariño del mundo”, ha rememorado la directora del Coro Columba, quien ha hecho hincapié en que, gracias a él, este domingo las ha cantado en Piélagos su formación, pero también integrantes del Coro Amigos de Boo y de la Asociación de Mayores de Castañeda.

En la misma línea, se ha referido a la representación teatralizada de las marzas que el pasado viernes llevaron a cabo los alumnos de la Escuela municipal de teatro de Piélagos y niños y niñas de Quijano. “Intentamos que esa semilla crezca con la ayuda de todos”, ha subrayado.

Las marzas de la salud y la paz

Por su parte, la alcaldesa de Piélagos, Verónica Samperio, ha asegurado que “todos tenemos mucho que agradecer a Antonino Herrera”. Así, ha dicho, él enseñó las marzas a “Koki” y ella a nosotros.

Durante su intervención, ha agradecido su presencia en el Centro Cultural Quijano a todas las personas que este domingo han acompañado a los marceros y que, un año más, hacen posible mantener viva la tradición, al tiempo que ha pedido “hacer un esfuerzo” para que no se pierda “una seña de identidad tan nuestra”.

“Las marzas anuncian siempre la primavera, la llegada de algo bonito”, ha explicado Samperio, quien se ha mostrado convencida de que, por eso, “este año hay que cantarlas con  más fuerza que nunca”.

“Venimos de un inverno muy largo, que parece se quiere alargar un poco más. Espero que las marzas nos traigan dos de las cosas que debemos desear todos: la salud y la paz. Que este año resuenen las marzas más fuertes que nunca”, ha pedido la regidora municipal.

De Renedo a Quijano

Las localidades de Renedo y Quijano han acogido este domingo la tradicional ceremonia de las marzas, organizada, un año más,  por la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Piélagos.

En esta ocasión, los coros Columba Quijano y Ronda Altamira han sido los encargados de interpretar los populares cantos petitorios con los que el municipio ha querido dar la bienvenida a una nueva primavera.

A las 18:00 horas, los integrantes de ambos coros se han concentrado ante la sede del Consistorio, en Renedo, donde han pedido permiso a la alcaldesa de Piélagos, Verónica Samperio, para cantar las marzas. A continuación, se han desplazado al Centro Cultural Qujano donde han vuelto a actuar.